Ayer, cuando estaba desayunando llegó un visitante inesperado: un pollo de reyezuelo listado. Se posó en la ventana y se quedó un rato jugando con su reflejo hasta que se durmió, y luego tal como vino se fue.
Yo creo que es un reyezuelo, pero igual me confundí porque al no tener el plumaje de adulto todavía no lo sé fijo, pero vamos esa miniatura sólo puede ser un reyezuelo ja ja. Pues sí, menos mal que estaba cerrada porque si llega a meterse en la cocina vaya lío.
Qué suerte.. Mira que mono es.. Un saludito..
ResponderEliminarPues si fue toda una suerte, a ver si repite je je
EliminarQué curioso que es ese reyezuelo. Porque tenías cerrada la ventana, si no se mete en casa y todo.
ResponderEliminarYo creo que es un reyezuelo, pero igual me confundí porque al no tener el plumaje de adulto todavía no lo sé fijo, pero vamos esa miniatura sólo puede ser un reyezuelo ja ja. Pues sí, menos mal que estaba cerrada porque si llega a meterse en la cocina vaya lío.
EliminarQue bonito ,por lo visto es tan sociable como el raitan y el tizón colirrojo.
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